El 2 de agosto saldremos en coche para Santander. Como la perra está ya viejecita, no nos atrevemos a dejarla con personas ajenas a la familia y tampoco queremos estresarla en un avión o en un barco. Así pues, nos dirigiremos a un clima fresco y a un punto desde el que poder hacer visitas de mar y de montaña.
Nos han recomendado que probemos las tapas de el restaurante "Vuelta y vuelta", aquí queda el enlace a una crítica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario